Hacia un futuro descarbonizado

La dimensión ecológica y la dimensión económica son los dos principales vectores sobre los cuales se basa la competitividad del gas natural.

hasta-50%

Un cambio simple con un gran impacto en los costos de combustible.

El GNV puede proporcionar una reducción de hasta un 50% en comparación con los combustibles tradicionales.

Dado que está menos expuesto a la volatilidad de los precios del mercado, permite una planificación más rigurosa de los costos operativos. Por tanto, asume una presencia cada vez más significativa en el sector del transporte público de pasajeros y en la recogida de residuos orgánicos, selectivos e indiferenciados.

El gas natural fue considerado el combustible del futuro, porque en realidad es el único suficiente-mente abundante, amigable con el medio ambiente, económicamente viable y con la infraestructura necesaria para suministrar a toda la flota automotriz del mundo, durante los próximos 100 años.

Se asume que el gas natural es la mejor forma de descarbonizar en la actualidad

Desde el punto de vista medioambiental, se puede afirmar categóricamente que el GNV es un combustible respetuoso con el medioambiente: tiene un menor nivel de emisiones de pasivos medioambientales y ade-más implica una reducción sustancial del nivel de contaminación acústica, que son una preocupación actual especialmente en el contexto de las grandes ciudades.

El gas natural, al asegurar una reducción de las emisiones de dióxido de carbono del 20% al 25%, estar libre de dióxidos de azufre y eliminar prácticamente los niveles de emisión de partículas contaminantes, puede ser claramente el combustible de transición para los próximos años.

El combustible que se adapta a cualquier necesidad

¿Cómo está disponible?

Gas natural comprimido

Forma gaseosa

El GNC es el menos contaminante y el más económico de todos los combustibles fósiles, y puede obtenerse de fuentes renovables (vertederos, explotaciones ganaderas, etc.), el llamado biogás.

Gás natural Liquefeito

Gas natural licuado

Forma liquida

El GNL tiene un enorme potencial como combustible realmente alternativo al petróleo en el sector del transporte, lo que permite la reducción de emisiones y costes.